Estamos en el siglo de la astrofísica. Más que nunca, los especialistas en el universo, las estrellas y su "historia" tienen acceso a valiosos datos. Sólo en 2022, las primeras imágenes del telescopio James Webb asombraron a todo el mundo. Nunca antes habíamos podido ver tan lejos en el espacio. Y esto no va a parar, sino todo lo contrario.
Poco a poco, como explica el astrofísico y director de investigación de la Comisión de Energía Atómica y Energías Alternativas (CEA) de Francia, David Elbaz, los astrofísicos empiezan a comprender mejor, entre otras cosas, las razones de las formas de las galaxias y su comportamiento. Si hasta ahora la comunidad científica ha podido analizar todos los datos recibidos, esto ya no será posible en 2024 o 2025. Otros dispositivos y telescopios podrán recibir el equivalente a todo Internet cada día. Esto mareará a los investigadores, que ya no podrán recurrir a la inteligencia artificial para que les ayude a procesar esta masa de información.
¿No existe el riesgo de que la inteligencia artificial tenga un grado de ignorancia similar al de los astrofísicos? Sí, pero para el Sr. Elbaz, esto es algo bueno. Analizando el universo sólo a través de estos medios, responderá directa o indirectamente a las preguntas. Además, podrá simular movimientos, formaciones y otras realidades del cosmos a partir de los datos recogidos.
Muchos juegos serios abordan el tema del desarrollo sostenible. Pero antes de que se propusieran estas soluciones, las personas innovadoras tuvieron que ir a contracorriente de la sociedad y luchar por mejorar su entorno. Un juego de aventuras con humor, presentado por el National Film Board, enseña a los niños las actitudes que deben adoptar para marcar la diferencia.
La alimentación es una preocupación diaria. Una serie de 6 juegos propuestos por el museo Alimentarium nos recuerda la importancia de una dieta equilibrada, de conocer los órganos del aparato digestivo para comprender mejor la digestión de los alimentos y otros temas relacionados con la alimentación. Esta iniciativa es tanto más interesante cuanto que no hay muchos juegos serios relacionados con la alimentación.
El mar está compuesto por agua salada que no es apta para la mayoría de las plantas. Sin embargo, una infraestructura flotante demuestra que es posible cultivar verduras en el mar utilizando mucha menos agua que la agricultura tradicional. Sólo hace falta un poco de ingenio para tener éxito.
El desperdicio de alimentos es una aberración ecológica y sociológica en los países occidentales. Afortunadamente, algunos países, como España, están tomando medidas para que sus restaurantes y hoteles se adapten. Una legislación interesante, pero que no afecta a una parte importante de los residuos comestibles: los residuos de los supermercados.
¿Cómo cambian los medios de comunicación nuestra percepción de la cultura? Hoy en día, las redes sociales están cambiando la forma de ver una imagen y recibir información.