Cada persona tiene su propio ritmo de lectura. Algunos devoran novelas en una noche, mientras que otros las dejan leer durante meses o incluso años. Kamel Kajout, ingeniero francés, es capaz de leer y comprender un libro de 300 páginas en 10 o 15 minutos. Esto le convierte en bicampeón del mundo de lectura rápida. Un método que, como él dice, ahorra tiempo, productividad y concentración. Pero, ¿cómo consigue descifrar las palabras tan rápidamente sin perder el sentido?
Primero analiza el libro. La portada, la contraportada (que lee en 15 segundos) y el contenido. Después se toma 30 segundos para imaginar un poco y comprender el esqueleto del libro. Luego empieza a leer y sigue su dedo constantemente. No importa el método (bolígrafo o tutor), siempre que la guía sea visual. Esto le permite mantenerse concentrado en la lectura.
Practicar la coherencia cardiaca le ayuda mucho. Se trata de una técnica de respiración, de unos 5 minutos de duración, ligeramente parecida a la meditación. Por último, aconseja tomar notas, es decir, resumir un libro con palabras clave.
En la encrucijada de los mundos de la política, la investigación, la empresa y la educación, los think tanks forjan nuevos conceptos y puntos de vista que alimentan las políticas gubernamentales o empresariales.